El pasado miércoles día 28 de Junio de 2023, nuestro compañero Javier Muñoz Barber, residente de MFyC del CS d’Almussafes realizó una sesión clínica sobre el Manejo de la ELA en Atención Primaria.
La Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) es una enfermedad neurodegenerativa caracterizada por la degeneración progresiva de las células motoras del sistema nervioso central, lo que conduce a la debilidad muscular y la pérdida de la función motora. En el ámbito de la atención primaria, desempeñamos un papel crucial en la detección temprana y el manejo integral de la ELA.
La detección temprana y el diagnóstico preciso son fundamentales para iniciar el tratamiento y el apoyo adecuados lo antes posible. Como médicos de atención primaria, debemos estar alerta a los síntomas iniciales característicos de la ELA, como debilidad muscular progresiva, espasticidad, fasciculaciones, cambios en la voz y dificultad para tragar. Ante la sospecha clínica de ELA, se debe derivar al paciente a un neurólogo especializado para realizar una evaluación exhaustiva y confirmar el diagnóstico.
Una vez que se ha establecido el diagnóstico de ELA, es esencial adoptar un enfoque multidisciplinario en la gestión de los pacientes. Esto implica colaborar estrechamente con especialistas en neurología, terapeutas ocupacionales, fisioterapeutas, logopedas y otros profesionales de la salud pertinentes. El objetivo es diseñar un plan de tratamiento individualizado que aborde los diversos aspectos de la enfermedad, como la terapia física y ocupacional para mantener la funcionalidad y la calidad de vida, así como la terapia del habla y la deglución para mejorar la comunicación y la alimentación.
Además de los aspectos médicos, es importante brindar apoyo emocional y psicológico tanto al paciente como a sus cuidadores. La ELA puede tener un impacto significativo en la calidad de vida y la salud mental de los afectados. Al proporcionar un espacio seguro para la expresión de emociones, ofrecer recursos de apoyo psicológico y ayudar a gestionar las preocupaciones emocionales, podemos contribuir a una mejor calidad de vida y bienestar general.
La ELA es una enfermedad progresiva y debilitante, por lo que el seguimiento a largo plazo es esencial. El médico de atención primaria debe estar preparado para gestionar los cambios en la funcionalidad física y las necesidades respiratorias en curso. Esto puede incluir la evaluación y el manejo del dolor, la prescripción de dispositivos de asistencia respiratoria y la coordinación con especialistas en cuidados paliativos cuando sea necesario.
En conclusión, en el ámbito de la atención primaria, debemos estar alerta a los signos y síntomas de la ELA para un diagnóstico temprano y un manejo integral adecuado. Al adoptar un enfoque multidisciplinario y trabajar en colaboración con especialistas, podemos proporcionar a los pacientes una atención integral que aborde tanto los aspectos médicos como los emocionales. La detección temprana y la gestión adecuada son cruciales para mejorar la calidad de vida de los pacientes y brindarles el apoyo necesario en su lucha contra la ELA.
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